Pues aún sin reponerme de mi largo viaje, logre apersonarme en la oficina de prensa a hacerme de mi gafete a buen tiempo, 35 minutos antes de que empezaran los juicios. Como cuando juegas cualquier deporte por primera vez lo primero es reconocer la cancha, por lo que me di a la tarea de recorrer los 8 pabellones donde se distribuían los 52 rings en donde se darían cita los poco mas de 15 mil perros provenientes de todos y cada uno de los rincones del mundo. Me costó un poco recorrerlos  todos, ya que tengo que decirlo, estaban bastante distantes unos de los otros, comencé por el número cinco que  es donde estaba el ring de honor, es decir el de los grupos y para mi sorpresa este edificio tenía un segundo piso, el cual albergaba seis rings. A las 8 AM en punto la bola estaba rodando, la justa máxima de la canófilia estaba teniendo lugar.  El website que contenía horarios y catálogo, fue hecho por la misma compañía que lo hizo en Ginebra por lo que me resulto fácil entenderlo. Una mundial cien por cien porciento digital, con el website en doce idiomas. También me entere que los títulos de campeón no eran entregados físicamente, aunque tampoco era gratis. La mecánica consistía en que pasabas a la oficina a pagarlo y se te era enviado por mail par que tu mismo lo imprimieras en la comodidad de tu casa, gran idea.

La riqueza d la diversidad.

Tengo que confesar que dadas la cercanía geográfica con la Republica Checa y ya habiendo estado en una mundial ahí me esperaba algo similar y fue así solo en parte. Me llamo poderosamente la atención la diversidad de idiomas, lo cual era de esperarse ya que muchos de los países aledaños tienen el suyo propio, el inglés afortunadamente primó y funciono como un conveniente puente entre culturas. Destacare lo numeroso la presencia rusa quienes destacaron por la calidad de sus perros, sus condiciones y por su nivel de manejo. La delegación italiana era notoria al igual que la española, ambas cosecharon triunfos que serán muy recordados. Los asiáticos estaban presentes en algunas razas y dominaron en número y calidad el ring de los Pomeranias. Ninguno en el panel juzgando, pero si presentes muchos jueces estadunidenses, quienes como yo estaban ahí con la positiva actitud de aprender y de enriquecerse al observar los usos y costumbres locales y por supuesto a observas las razas que comúnmente no vemos.

Uno de los choques visuales mas fuertes que tuve fue ver a un juez de nacionalidad serbia examinar las mordidas de una clase entera de hembras Dóbermans mientras estas estaban perfectamente sentadas y era el mismo quien, no se si decir con mucha seguridad o con mucha falta de prudencia y con mano bastante pesada revisaba hasta el último molar. Publique ese video ese mismo día y se convirtió en uno de los mas virales. De el doble manejo mejor ni hablamos, el ring de Dóberman, Boxer y Rottweiler eran una locura.

Una persona de España me increpo en las redes sociales y me dijo que porque perdía mi tiempo viendo ese espectáculo tan desafortunado, a lo que conteste que yo no venía de tan lejos para ver lo mismo que tengo en casa y que los diversos usos y costumbres enriquecen la canófilia, nos gusten o no los gusten.

Nunca había tenido la oportunidad de ver juzgar una clase completa de Dachshund en a que el juez les midiera el perímetro torácico con una cinta metrica a todos y cada uno de los perros, me pareció genial y me motivo a aprender mas al respecto.

Otra práctica muy interesante que aunque ya la había visto fue en una clase bastante grande de Akitas, seguramente la de Campeones que consistía en que el juece mandaba a toda la clase a mover alrededor en un sin parar y con la mano iba seleccionando a los que le justaban y los llamaba al centro del ring.

El lugar del evento

Se notaba la buena voluntad y la diligente administración de los tiempos de los organizadores para que todo resultara perfecto, pero tengo que decirlo, el recinto ferial los obligo a que algunos rings estuvieran pegados a la pared, lo cual al no permitir que el público se distribuyera alrededor provoco algunas aglomeraciones, el especial el pabellón donde estuvieron los Poodles y los Afghanos, como ya lo mencione anteriormente la distancia entre los edificios nos dio mucho que caminar.

El ring del prejuzgamiento.

Como es costumbre en las mundiales todos los grupos son prejuzgados lo cual sucede en un ring cerca de la entrada al ring de honor. Pues tengo que decir que en esta ocasión funciono de manera extremadamente ordenada, la mecánica era la siguiente: eran prácticamente tres rings, en el primero se llamaban a los ejemplares en cuestión y se les ordenaba pertinentemente, de ahí pasaban al segundo en donde el juez los tocaba y los movía de manera ordinaria, después pasaban a un tercero en donde aguardaban el momento para hacer su aparición estelar en el ring de honor.

La calidad de Xolos

Para empezar los números ya eran una buena señal 32 estándares, 7 Intermedios y 29 minis. Estaba seguro de que me iba a encontrar a muchos Xolos conocidos, incluso a uno que otro que ya había juzgado. En los estándares fue así, con sus  excelentes temperamentos y armonía en sus angulaciones fueron el deleite de todos los que estábamos ahí y los vimos mover.

Pero tengo que decirlo y gritarlo a los cuatro vientos la grata sorpresa vino cuando los de la variedad miniatura comenzaron a ingresar a la pista y la llenaron con sus proporciones correctas, sus sustancias adecuadas y sus solidas personalidades al estar sobre la mesa. Bien dicen que a veces cada quien habla desde sus experiencias pasadas, pues bien, después de ver lo pobre tanto de los huesos como de los temperamentos juzgados por el Dr Jose Luis Payro en Ginebra lo que llego a Zagreb fue la gloria bendita, como juez mexicano y como amante de la raza fue un reencuentro con el balance y con el tipo. Tanto los triunfadores en estándars y minis son criados por mexicanos o mejor dicho por mexicanas, felicidades, ellas saben quiénes son. ¡Bravo, bravísimo!

Los perros de  Shintaro Aoki M,  Alberto Campos D y Sixto Langarica  así como los del criadero McRoc tuvieron también una participación destaca, ahora bien lo que realmente hay que reconocer es su esfuerzo a llevar los perros hasta allá, la pasión por nuestra raza nacional es algo que tiene toda mi admiración y solidaridad, felicidades a todos.

Los Basenjis de nuestra amiga Letty Elizalde sobresalieron en la categoría de Minor Puppy. El Lakeland manejado por el yucateco Francisco Padilla y propiedad de Alvaro E Castro de Costa Rica logro ganar una raza en los eventos previos a la mundial bajo el juzgamiento de nuestro querido Roberto Velez P. Una disculpa si no tuve conocimiento de alguno mas por ahí.

Los extravagantes

Como es costumbre hay algunas razas nuevas, no reconocidas a las que yo me refiero como “emergentes” que aprovechan estas ocasiones paran ser promocionadas. En esta ocasión el Mongolian Bankhar fue quien se robo todas las miradas con una producción magnifica. Para empezar tenía dos stands en el área comercial con decoración y personajes con vestimenta autóctona y un musico que con el violoncelo interpretaba música típica además por supuesto de exhibir un perro de la raza que por cierto me resulto bastante atractivo a la vista. Por si esto fuera poco tuvo la suerte de ser escogido como mejor de grupo XI.

Mi participación dentro del ring

En esta ocasión tuve un perro que exhibir, se trarto de un Beagle de 11 meses en la categoría de Junior que reside en el vecino país de Austria. Me resulto muy gratificante que al juez uruguayo Adrián Landarte le gustara mi perro y me permitiera ganar la categoría de Junior haciéndolo así campeón mundial Junior, un día para recordar.

Zaida.

Poco después de que Croacia entregara la bandera de la FCI a Finlandia llega el emocionante momento de el Mejor de Exposición. Como representante del grupo X apareció por la puerta de ese ring Zaida una Afghano leonada con mascara negra de crianza chilena, radicada en Florida y manejada por un cubano. No le tomo mucho tiempo llenar el entorno con el glamor de su belleza y su extrovertida personalidad. Todo estaba dicho, sedujo a la concurrencia y al juez también y se llevó a casa la mona mas grande, la mas preciada.

La libertad

Pues bien amigos voy terminando ya con mis letras que retratan mis vivencias en Zagreb  y quiero terminar diciendo  que lo que mas me gusto de esta mundial  fue la sensación de libertad, no había letreros de restricciones, incluso razas de las que en Europa se consideran como “intocables” en cuestión del arreglo iban arregladas de manera tal que se resaltaban sus cualidades. Los collares corredizos nos permitieron a los manejadores comunicarnos de manera eficiente con nuestros perros y hacerlos lucir al máximo. Los copetes de los Poodles se presentaron en todo lo alto, como debe de ser.

Ha sido un placer compartir con ustedes esta enriquecedora experiencia ahora a sentarme pacientemente a editar video, los veo en mi canal http://www.youtube.com/@PlaticasCaninas no se pierdan ninguno de mis videos. Nos vemos el Helsinki.

¡Lo mejor está por venir!

PD: Me hallaba sentado ya en primer vuelo de mi jornada de retorno a casa y para mi sorpresa vi aparecer a Willy Santiago, manejador de Zaida ganadora del mejor de exposición, con quien tuve ocasión de tener una interesante conversación. Vaya que mejor manera de terminar mi viaje.